Subida al Taillón desde el Col de Tentes

Descripción de la Subida al Taillón desde el Col de Tentes

De Col de Tentes al Refugio de Sarradets 4,8 Km

El recorrido se inicia en el aparcamiento del Col de Tentes (0h 00min) en Gavarnie.

Desde aquí seguimos la continuación de la carretera por la que llegamos, una amplia pista por ahora acondicionada y con carteles didácticos que nos amenizan los primeros pasos del recorrido.

Frente a nosotros podemos contemplar o mejor dicho intuir el itinerario que seguiremos y que atraviesa desde la cara norte del Gabieto Oriental hasta el Col de Sarradets bajo la atenta mirada de la cara norte del Taillón.

La pista nos conduce entre bloques de piedras hasta el Puerto de Bujaruelo (0h 20min), punto de unión de numerosos recorridos, entre ellos el que llega desde el fondo del valle de Bujaruelo, otra de las vías habituales para ascender hasta el Taillón.

Después de contemplar el magnífico espectáculo que este puerto nos brinda, con vistas a ambas vertientes, emprendemos la senda que antes, desde la pista por la que llegamos, intentábamos descubrir por donde discurría su trazado.

Un primer esfuerzo que apenas se prolonga y que nos devuelve rápidamente a un terreno menos exigente. Esta parte del recorrido por ahora bastante cómodo nos permite imaginarnos el antiguo Glaciar de los Gabietos cuyos restos a duras penas resisten hoy en día.

El trazado a medida que vamos adentrándonos en la ladera norte de la montaña va modificando su aspecto obligándonos en ocasiones a buscar el mejor lugar para salvar algunos puntos del recorrido. En ellos, normalmente, la senda desaparece obligándonos a retroceder unos metros para remontar por las piedras y proseguir nuestro camino.

Los hitos de piedras, nuestra intuición o los bloques de piedras posicionados delimitando el camino al otro lados del abrupto terreno en el que nos encontramos, nos servirán de referencia para reconocer el lugar por el que debemos afrontar estos pasos, que en condiciones normales no representan mayores complicaciones.

El itinerario nos lleva a recorrer la imponente cara norte de la montaña en busca de su esbelta arista noreste, que nos esconde por ahora el inconfundible Glaciar del Taillón coronado por El Dedo o la Falsa Brecha.

Esta zona más pedregosa nos hace ir ganando altura paso a paso por una senda bien marcada y sin mayores complicaciones. Ante nosotros se presenta lo que a primera vista parece una casi insalvable muralla por la que cae en ocasiones un caudaloso arroyo.

La senda se encuentra en este punto con el recorrido que asciende desde la cercana Cascada de Gavarnie, para juntos comenzar el serpenteante ascenso hasta el Col de Sarradets. El itinerario nos lleva al famoso paso de la cadena en la cascada del arroyo, este paso ha sufrido y sufre continuas variaciones debidas en parte al caudal del arroyo, a la erosión y a pequeños desprendimientos.

Variaciones que han propiciado la desaparición de la ya de por si maltrecha cadena y la variación del itinerario habitual, que seguía el curso del torrente por su lado derecho según lo ascendemos hasta encontrar el lugar de cruzarlo.

Ahora dependiendo del volumen de agua del arroyo, tendremos que buscar el mejor lugar para cruzarlo nada más encontrarnos con él, las antiguas flechas rojas, que pintadas sobre las piedras señalaban el sentido a seguir, nos sirven de referencia para localizar el recorrido que continúa tras las piedras donde están pintadas.

Dependiendo el estado del arroyo el itinerario remonta unos pocos metros por el antiguo cauce de la cascada, donde podremos ver los agujeros dejados en la roca por los soportes de la antigua cadena, para atravesar el arroyo y salvar las rocas pintadas con las flechas rojas y retomar el trayecto, incluso con poco caudal y paciencia todavía es posible seguir el maltrecho tramo de cascada hasta el antiguo paso.

El recorrido nos lleva a la pared contraria para hacemos ascender por un verdadero caos de piedras siguiendo las pocas flechas rojas que señalan este recorrido. Si nos fijamos con calma podremos ver el curso que la maltrecha senda sigue hasta encontrarse con el antiguo trazado que tras ascender la cascada se encaminaba hacia el lado izquierdo dejando a nuestra derecha el glaciar.

Aquí es importante tomarnos unos segundos para memorizar referencias que nos sean de ayuda en el descenso, ya que lo normal es seguir la bien marcada senda que nos lleva al inicio del descenso por el antiguo tramo de la cadena haciéndonos perder el rumbo correcto y dejándonos en un verdadero laberinto de sendas y bloques.

Los hitos de piedras y las escasas flechas rojas nos dan la pauta a seguir mientras que ganamos altura rápidamente serpenteando por la laguna de rocas bajo la atenta mirada de El Dedo del Taillón.

No sin esfuerzo llegamos a disfrutar de la preciosa panorámica que guarda el Col de Sarradets (1h 30min), desde el que comenzaremos un suave descenso que nos acercará a nuestro siguiente objetivo.

El espectacular emplazamiento del Refugio de Sarradets (1h 35min) nos permite prepararnos para la siguiente parte de la ascensión mientras que disfrutamos del entorno que nos rodea.

Del Refugio de Sarradets a la Brecha de Roland 0,7 Km

La impresionante silueta de la Brecha, hacia la que nos dirigimos, casi nos enmascara la pedregosa y dura subida que tenemos por delante hasta ella. Junto al refugio parte la senda que gana altura rápidamente recorriendo la arista del canchal de piedras que lleva hasta el Nevero de la Brecha.

Para encontrar el inicio de esta senda nos puede servir como improvisado guía la canalización de agua que baja hasta el refugio desde el nevero, ya que no son pocos los que errados descienden al cancharral para luego remontar por su lateral hasta la senda.

Mientras que si seguimos a través del caos de bloques ciñéndonos al lateral de la montaña por la que llegamos hasta el refugio, pronto encontraremos el camino sin vernos obligados a un esfuerzo mayor al tener que recuperar la altura perdida.

Este tramo conviene tomárselo con calma, como sabemos las distancias y la exigencia requerida para salvarlas en montaña, no son siempre lo que parecen y ésta no ha de ser una excepción.

Una vez salvada esta primera terraza es aconsejable tomar las referencias oportunas para encontrar a nuestro regreso el punto donde comienza el descenso hacia el refugio.

Ahora nos enfrentamos al cambiante nevero que habitualmente se mantiene todo el año en esta parte del itinerario y que puede llegar a obligarnos a calzarnos los crampones para cruzarlo incluso bien avanzado el verano.

Una vez salvado este tramo nos enfrentamos a la parte final del ascenso hasta la base de la brecha, un pedregoso sendero que cruza transversalmente hacia la pared izquierda según estamos, dirigiéndonos hacia ella.

Después de unas típicas zetas, que nos alivian en parte el desnivel, llegamos a la parte más escarpada de esta zona donde no tendremos otro remedio que realizar una corta y sencilla trepada para salvar un pequeño escalón que nos bloquea el paso.

Aquí debemos estar atentos, ya que lo descompuesto del terreno junto a las diferentes opciones que la gente ha intentado buscar nos pueden llevar a pasos de mayor dificultad que el habitual. Salvada esta parte ya solo nos queda un corto y serpenteante trazado hasta encontrarnos en medio de las dos imponentes paredes que forman la Brecha de Roland (2h 30min).

De la Brecha de Roland a la cima del Taillón 1,6 Km

Una vez recuperado el aliento y disfrutado del maravilloso panorama que nos rodea desde este exclusivo lugar nos encaminamos hacia nuestro verdadero objetivo. Aquí los diferentes senderos que parten o llegan a este punto pueden llevarnos a error, así que como referencia para encontrar el camino correcto podemos tomar la pared derecha de la Brecha, según llegamos a ella desde el refugio.

Dejando a nuestra espalda el itinerario que nos llevaría al famoso Paso de Los Sarrios, tendremos que remontar los bloques de piedras arrimándonos hasta casi tocarla a la pared de la Brecha, donde frente a nosotros podremos ver el inicio del empedrado sendero por el que debemos continuar.

El trayecto nos lleva siguiendo la línea que marca la montaña cruzando transversalmente la inclinada ladera de piedras que, sobre todo a la bajada, nos obliga a ir atentos para evitar resbalones o caídas. No son pocos, aunque si cortos, los pasos en los que la senda desaparece y deberemos andar de piedra en piedra hasta reencontrarla, siempre siguiendo el mismo rumbo.

Pronto y sin casi darnos cuenta comenzamos a ganar altura a la vez que poco a poco van apareciendo ante nuestros ojos el Taillón y la Falsa Brecha. Tras una dura rampa nos encontraremos frente por frente con la Falsa Brecha o El Dedo (2h 55min) como también se la conoce.

Éste es, podría decirse, el paso más complicado de todo el recorrido, ya no por su dificultad técnica sino por lo expuesto del trazado en el que no hay opción para caídas.

Bordeamos el Dedo por su base derecha tal y como llegamos hasta él, por un estrecho pero suficiente piso con buenos agarres si fuera necesario echar mano para asegurar nuestro paso. Pronto nos encontramos ante la cavidad que se esconde en la base del Dedo, es aquí donde vuelve a variar el recorrido haciéndonos pasar a la otra cara de la montaña entre el Dedo y una gran roca que señala el paso.

Podríamos seguir por este lado norte pero el trazado se difumina y el terreno está más inestable aumentando la dificultad y el riesgo sin necesidad. Una vez al otro lado debemos retomar el avance buscando la forma más cómoda para cada uno de nosotros.

Desde aquí vuelve la más o menos amplia senda que nos llevará hasta la cima, pero antes nos volveremos a encontrar con otra bifurcación en la que deberemos elegir entre seguir la senda por la expuesta cara norte con el glaciar a nuestros pies o decantarnos por el lado Español de la montaña y atravesar una zona crestera, sin demasiada complicación.

Si elegimos esta opción rápidamente nos encontraremos con una abertura que nos permitirá regresar a la otra vertiente y seguir ahora la senda mucho menos expuesta. Es a partir de esta zona donde volveremos a enfrentarnos al desnivel que todavía nos resta para conquistar la cima.

Por delante un trazado claramente visible que primero serpentea por la montaña y luego la cruza casi de lado a lado hasta llevarnos a la misma cumbre del Taillón (3h 45min). Cabe la posibilidad de acortar la subida, a costa de aumentar la inclinación del desnivel, tomando recto el hombro de la montaña, pero este trazado exige una mayor preparación física y técnica que la subida habitual.

Del Taillón al Col de Tentes 7,1 Km

Una vez disfrutado de las vistas que esta cima ofrece es hora de emprender el regreso siguiendo los pasos que nos trajeron hasta aquí.

En el descenso a las habituales precauciones que siempre debemos tomar, tenemos que sumar lo importante de no despistarnos del camino o mejor dicho de la senda a seguir para evitar vernos en terrenos complicados o demasiado expuestos. También es importante tener claras las referencias tomadas a nuestra subida para encontrar los pasos e inicios de la senda que nos llevarán por el sitio correcto.

Las condiciones de la nieve en el nevero y el caudal del arroyo en la cascada seguramente habrán variado de cómo nos los encontramos en el ascenso, por lo que no debemos confiarnos al llegar a ellos.

Por lo demás, el descenso hasta el Col de Tentes (5h 50min) no reviste mayor complicación que la sumada por nuestra condición física después del esfuerzo y las variaciones que del recorrido hagamos.

Ficha técnica de la ruta

Distancia. 14,2Km

Esta cifra siempre es orientativa ya que depende de muchos factores que la pueden llegar a afectar.

Tiempo. 5:50h

El tiempo a emplear en este tipo de rutas puede variar mucho debido a muchos factores, el estado de la ruta, nuestra condición física o la habilidad que tengamos para movernos con agilidad y también si durante el recorrido debemos andar poniendo y quitando por ejemplo los crampones, sin decir el tiempo que dediquemos a disfrutar de cada esplendido lugar por el que pasaremos. Por ello es importante darse margen teniendo en cuenta las horas de sol y aprovechando las primeras horas de luz para ganar terreno a la ruta.

Época del año

El recorrido, sin nieve y con buenas condiciones nos permite disfrutar de una gran montaña y su abrupto ambiente pirenaico sin exigirnos un gran conocimiento o nivel técnico. Además las panorámicas que podremos disfrutar los días despejados compensan con creces el esfuerzo necesario. Aun en pleno verano es habitual encontrarse con neveros a nuestro paso, sobre todo él de la Brecha, por lo que es importante, como no puede ser de otra manera, conocer el estado de la ruta y las condiciones que nos vamos a encontrar. Con nieve o hielo la dificultad del itinerario se amplía considerablemente reservándolo para montañeros experimentados en este tipo de terrenos, además el trazado a seguir varia en función del estado de la nieve y su acumulación, aunque el ya de por si bonito paisaje que envuelve esta ruta se convierte en un verdadero espectáculo digno de ver.

Material necesario

Bota estival semirrígida, aunque algo más pesada es una buena opción a la que tenemos que sumar ropa de abrigo ya que los cambios en el estado del tiempo y la temperatura suelen ser rápidos y habituales. Además de adecuar nuestro equipamiento, calzado y ropa, a las condiciones meteorológicas y de la montaña son varios los materiales que seguramente nos serán de utilidad, los crampones y por ende el piolet o el casco que nos proteja de las piedras que llegan a caer en la zona de la Brecha, sin duda aumentan el peso de nuestra mochila pero no es agradable echarlos en falta en la montaña. En la oficina de información de Gavarnie tenemos datos actualizados que nos informan del estado del recorrido y del material necesario para el mismo. Agua y comida tampoco pueden faltarnos en una ascensión exigente y larga, al igual que los bastones, los cuales sin duda nos serán de ayuda. El móvil con batería cargada, la protección contra el sol, gafas, crema... tampoco se nos puede olvidar, al igual que un mapa de la zona y el GPS con el tracks del recorrido, ya que la niebla y el mal tiempo pueden sorprendernos con relativa facilidad haciendo muy difícil seguir la ruta. Consulta nuestra lista de material y equipamiento para hacer senderismo. Leer más

Dificultad. Poca dificultad

Física

La ventaja de comenzar la ruta ya a una altura considerable y que sus primeros kilómetros sean más o menos cómodos por su suave desnivel hacen que este recorrido pueda parecer menos exigente de lo que en realidad es. Nos vamos a encontrar con la práctica totalidad del desnivel concentrado en la segunda mitad de la ruta, pero con la ventaja de escalonarse permitiéndonos recuperarnos de cada esfuerzo en los descansillos que nos vamos encontrando. La subida hasta el Col de Sarradets, entre las rocas, se hace muy amena, es el tramo entre el refugio y la brecha donde es importante contenernos y guardar fuerzas en este duro repecho, ya que aunque no lo parezca todavía resta mucho que andar y subir. Por lo demás, para alguien habituado, es una ascensión que tomada con la suficiente calma no debiera de suponer grandes problemas en lo físico.

Técnica

Aunque sea un recorrido catalogado como poco difícil no debemos olvidar que estamos en la alta montaña y que esta catalogación parte ya de un nivel de dificultad alto en comparación con otras rutas, tanto en lo físico como en lo técnico. A priori son tres los puntos más conflictivos de la ruta, la zona de la cascada, donde el caos de bloques y el curso del arroyo nos exigen calma para progresar con seguridad, el acceso final a la Brecha, que junto al estado del nevero y una pequeña trepada, sencilla pero algo expuesta, pueden ponernos en aprietos de no tener la experiencia y confianza necesaria y el paso de la Falsa Brecha donde no están permitidos los resbalones dado lo expuesto de esta parte del recorrido y la dificultad para seguir la ruta correcta en algunos puntos de este corto tramo. La caída de piedras producida por la acción de la erosión o del montañero que transita por delante de nosotros, son un habitual sobre todo en la zona de la Brecha. Atención a los resbalones en los cancharrales, si bien están bien pisados la pendiente y el cansancio a nuestra bajada pueden jugarnos una mala pasada. Por otro lado no es extraño toparnos ya no con neveros sino con tramos en las que las rocas estén heladas y nos toque progresar sobre verglás o en mixto, ampliando considerablemente la dificultad técnica de la ruta. También deberemos enfrentarnos a lo largo del sendero que nos lleva hasta la base de la cascada con un par o tres de pasos en los que el sendero desaparece obligándonos a progresar por las lascas para salvar los normalmente secos arroyos que nos cortan el camino, pero estos pasos tomados por el sitio correcto y en condiciones normales no revisten complicación alguna.

Orientación

Los pocos cruces con los que nos vamos a topar están bien señalizados indicando hacia donde sigue cada senda, el problema viene en varios puntos por los diferentes trazados que se han ido creando y que muchos de ellos nos llevan a complicados e innecesarios pasos. Como no podía ser de otra forma son los puntos más complicados, el tramo de la cascada, la zona de la Brecha y el entorno de El Dedo donde más dificultades vamos a encontrar para seguir el itinerario aun estando éste en perfecto estado es decir sin nieve, hielo o agua en abundancia. Atención con las flechas rojas de la cascada, muchas de ellas señalan el antiguo trazado que se seguía, también en la Brecha si seguimos la empedrada senda nos lleva directos a la pequeña trepada, además una vez entre las dos paredes el recorrido se pierde y las sendas que vemos en ese punto no son las que debemos seguir, nosotros tenemos que subir por las piedras como si fuéramos hacia la base de la pared para poder reencontrar la senda correcta que sigue casi junto a ella. Cuidado con el paso por El Dedo es algo expuesto, y al llegar a la cueva si seguimos por la misma vertiente nos encontraremos con un paso delicado y estrecho, mientras que si saltamos al otro lado podremos continuar con precaución pero sin tanto peligro. Es importante tomar nuestras referencias a la subida en la cascada y en el final de la rampa que sube hasta el nevero desde el refugio para evitar confusiones en el descenso. Que no te engañe la senda en el tramo que va del Col de Bujaruelo a la cascada de la cadena, te encontraras que esta desaparece en un par de puntos cortada por lo que parecen cauces secos de arroyos, si retrocedes unos pocos metros veras con claridad como remontando por las lascas del lateral éstas te llevan al paso correcto donde poder retomar la senda.

Coordenadas UTM Datum WGS84

Perfil de la ruta

Cartografía, mapas y tracks

Este esquema de la ruta no está hecho a escala ni contiene toda la información relativa a la zona, es meramente orientativo.

Este esquema con el trayecto es aproximado y ha sido creado a partir de la base cartográfica derivada © Instituto Geográfico Nacional "Cuadrante 146-3 y 146-4 1:25.000"

Senditur ha manipulado los tracks para corregir los puntos aberrantes que pudieran existir, ocasionados por problemas con la recepción de la señal GPS. En cualquier caso los tracks son siempre aproximados. SENDITUR te anima al uso de las nuevas tecnologías a tu alcance, utilizándolas a modo de apoyo y consulta en tu actividad, no basando la realización y la orientación de la misma única y exclusivamente en ellas, ya que éstas pueden ver alterado su funcionamiento por muy diversas causas, no funcionando correctamente y llegando a no ser precisas sus indicaciones.