Dehesa de Puras de Villafranca

Descripción de la ruta de la Dehesa de Puras de Villafranca

El inicio del recorrido se sitúa bajo la ermita de San Quirico y Santa Julia que en lo alto de su cerro domina todo Puras de Villafranca (0h 00min).

Un gran cartelón del complejo minero nos informa de los datos básicos de la ruta, al mismo tiempo que nos marca el comienzo del camino que debemos seguir.

Al momento nos encontramos con la primera bifurcación, el valle por donde fluye el arroyo que llega hasta Puras es el encargado de guiarnos en esta parte de la ruta.

Nos despedimos del edificio de las antiguas oficinas de las minas junto al desvío que lleva hacia las diferentes bocaminas que aquí existen, para proseguir el recto rumbo que nos marca la pista por la que vamos. Rápidamente nos encontramos con el cartel informativo de la Cueva de Fuentemolinos y la senda que a nuestra derecha conduce hasta ella.

El desnivel no supone un gran esfuerzo prácticamente en todo el itinerario, ya que desde un primer momento comenzamos a ganar altura dejando cada vez más abajo el arroyo que nos acompañaba desde Puras. El buen estado de la pista y su amplitud junto a las marcas del recorrido nos facilitan seguir la ruta con facilidad.

El paisaje nos permite observar las diferentes formaciones rocosas que se han ido formando a lo largo de los años, mientras seguimos remontando el valle intercalando zonas de mayor desnivel con otras prácticamente llanas.

Dejamos atrás un camino que a nuestra izquierda comienza a remontar la ladera de la colina para seguir el curso del valle envueltos por las suaves montañas que lo forman.

Las hayas, las encinas y las diferentes especies arbóreas que aquí habitan nos brindan un magnífico espectáculo lleno de color a la par que avanzamos sin mayores dificultades. A cada paso nos sorprenden la envergadura y las curiosas formas que tienen los grandes troncos de los árboles que nos rodean.

El valle va perdiendo anchura obligando a nuestro camino a serpentear entre las laderas de las montañas que lo encajonan a la par que ganamos altura a cada paso. Las antiguas marcas del PR que estamos recorriendo aún resisten el paso del tiempo dándonos una referencia más junto a los carteles que indican la ruta.

Son varios los abrevaderos para el ganado junto a los que vamos a pasar mientras continuamos ganando altura y el valle comienza a dar paso a zonas más abiertas. La dehesa sigue manteniendo su actividad ganadera en los verdes pastos que la componen y que en ocasiones llegan a cubrir el camino por el que transitamos.

Las rodaduras de los vehículos que por aquí han pasado nos sirven de referencia a seguir en caso de duda, aunque como viene siendo habitual seguimos dejando tras nosotros todos los caminos con los que nos vamos encontrando. Casi sin darnos cuenta hemos dejado atrás el valle y transitamos a través de la dehesa, acercándonos cada vez más a la llanura que nos espera más adelante.

Casi al mismo tiempo que la silueta de las grandes cimas de la sierra de La Demanda se muestra ante nosotros, nos encontramos con un primer cruce de caminos donde continuaremos por el camino de la izquierda que desciende unos metros.

Al momento este camino vuelve a dividirse, nosotros en este nuevo cruce debemos seguir el camino de la derecha que mantiene un desnivel más suave dejando el de la izquierda que gana altura más notablemente. Unos pocos metros más adelante nos encontramos con una marca de la ruta que nos confirma la correcta elección tomada en el cruce anterior.

La vegetación vuelve a cubrir la pista de tierra al mismo tiempo que pasamos junto a los restos de los antiguos refugios de los pastores que se resisten en desaparecer del todo de este paisaje. La ruta nos va acercando al lindero de un frondoso bosque de pinos mientras continua haciéndonos ganar altura.

Por el momento seguiremos bordeando el bosque de pinos cuyo lindero queda a nuestra derecha. No son muchos los caminos que en este tramo nos encontramos y que normalmente de seguirlos nos adentrarían en el bosque, pero por ahora seguimos sin disfrutar de la sombra que éste ofrece.

Nuestra pista también parece querer disfrutar de la poca sombra que la ruta nos ofrece y nos introduce de soslayo en el pinar donde el barro nos obliga a avanzar buscando las mejores zonas para pasar.

Este corto tramo de bosque finaliza súbitamente brindándonos una espléndida panorámica de la sierra de La Demanda que se extiende ante nuestra mirada. Aquí la ruta gira hacia la izquierda bordeando el bosque a la par que nos separa unos metros de su lindero. El difuminado camino nos conduce hasta un cercano montículo de tierra donde una señal nos verifica el buen rumbo elegido.

Estamos en la amplia llanura que forma el Cabeza de Muladardo (1h 40min) y cuya verdadera cima se esconde entre los matorrales que nos flanquean. Nada más pasar este montículo empedrado nos encontramos con una nueva bifurcación, si nos fijamos bien en la arboleda que divide a los caminos veremos las marcas que nos indican el rumbo a seguir.

La ruta sigue el camino de la derecha haciéndonos recorrer la amplia planicie y dejándonos contemplar la comarca de la Riojilla Burgalesa, que se extiende a nuestra izquierda mientras avanzamos.

En esta zona la ruta es algo más difícil de seguir debido al estado del camino casi diluido por el pasto que lo cubre, siendo las rodaduras de los vehículos que ahondan el terreno, alguna solitaria marca y la cercanía de un vallado, las únicas referencias que nos servirán para proseguir correctamente la ruta.

Esta parte del recorrido transita casi en su totalidad con la sierra de La Demanda a nuestra derecha, al mismo tiempo que bordeamos el valle del río Urbión. El camino dibuja diferentes trazados en busca de salvar embarrados tramos que mantienen su estado tiempo después de las últimas lluvias.

La ruta nos aleja y nos acerca de la alambrada que delimita la altiplanicie por la que caminamos con el valle que nos flanquea el recorrido. Cuando el camino parece alejarnos de los límites del valle las marcas de la ruta vuelven a acercarnos hasta él para poder seguir disfrutando del paisaje que nos rodea.

La ausencia de obstáculos nos permite contemplar, los días despejados, una amplia panorámica del horizonte al mismo tiempo que el curso que sigue el camino por el que vamos. Al rato comenzamos el descenso despidiéndonos del cómodo trazado que estábamos siguiendo.

El camino se despide de la alambrada que nos acompañó por un tiempo para serpentear entre las encinas buscando perder altura rápidamente mientras nos conduce hacia el valle por el que nos dirigiremos hacia Puras.

Tras unas empinadas rampas llegamos al fondo del valle donde otra alambrada nos obliga a girar bruscamente para continuar el descenso junto a ella.

Esta parte del recorrido vuelve a seguir un camino bien marcado que en progresivo descenso no deja lugar para muchas dudas en los pocos cruces que nos encontramos. El valle de Aguas Puras se sitúa frente a nosotros indicándonos la cercanía del final de la ruta y del descenso que estamos realizando.

Una improvisada puerta que impide el paso al ganado bloquea el camino, aquí la ruta cruza esta puerta para seguir su curso. La senda que se inicia en este punto nos da la opción de seguirla bordeando la alambrada y retomar la ruta justo a la entrada a Puras. Nosotros seguimos el camino que ya nos permite contemplar entre la arboleda las primeras casas de Puras.

Otro de los pozos mineros que aquí se encuentran es el encargado de darnos la bienvenida a la localidad, a la que entramos tras cruzar el río que la baña.

Desde aquí solo tendremos que recorrer los escasos metros que nos separan del lugar donde iniciamos esta ruta en Puras de Villafranca (2 h 30min) y que es donde también finaliza.

Ficha técnica de la ruta

Distancia. 10,8Km

Nuestro recorrido por la zona de las minas será quien más pueda incrementar esta cifra.

Tiempo. 2:30h

El tiempo que empleemos en fotografiar y disfrutar del entorno que nos rodea es lo que condicionará la duración de la ruta ya que no tendremos desvíos alternativos que nos hagan sumar minutos a este recorrido.

Época del año

Si bien durante todo el año encontraremos motivos más que suficientes para justificar este recorrido, en otoño nos encontraremos con un espectacular y colorido paisaje que lo hará aún más interesante. La primavera y el verano nos brindan días de muy buena visibilidad que nos permitirán contemplar con detalle el paisaje que nos rodea. El invierno, recio por estas tierras, nos puede llegar a ofrecer una buena opción para los amantes de las rutas con raquetas de nieve, siempre que tengamos la experiencia suficiente realizando rutas de este tipo.

Material necesario

En verano o los días calurosos es imprescindible llevar agua ya que salvo en Puras, no tendremos fuentes donde poder beber en todo el recorrido. Ropa y calzado deportivo tipo zapatilla de senderismo, siempre por supuesto adaptado a las condiciones climatológicas y a la época del año, es todo cuanto necesitaremos en condiciones normales. El barro puede complicarnos algunos tramos de la ruta por lo que contar con un calzado de repuesto en el coche puede ser una buena idea. La protección contra el sol tampoco nos puede faltar ya que apenas tendremos zonas de sombra en toda la ruta. Los bastones siempre suelen ser de gran ayuda y más si caminamos entre el ganado, también no puede faltarnos un mapa o el GPS con el tracks del recorrido, que aun estando bien señalizado resultara complicado de seguir si se nos echa la niebla. Consulta nuestra lista de material y equipamiento para hacer senderismo. Leer Más.

Dificultad. Media

Física

Tanto la distancia como el desnivel a salvar son perfectamente asumibles para alguien acostumbrado medianamente a caminar, además si nos damos el margen de tiempo suficiente podremos tomarnos la ruta con la calma necesaria en las cortas rampas que tenemos que afrontar.

Severidad del medio

Siempre y cuando no nos salgamos de la ruta marcada no tendremos ninguna dificultad ya que ésta transita normalmente por pistas en buen estado, siendo el barro y el rápido descenso final los escollos que más nos pueden complicar la jornada y donde más atención tendremos que prestar para evitar resbalones.

Orientación

La ruta está bien señalizada, en contadas ocasiones coinciden las señales de la ruta con las antiguas marcas del PR que por aquí transitaba. En condiciones normales y salvo algún punto donde las señales nos obligan a buscarlas con más detenimiento, no tendríamos que tener mayor complicación para seguir la ruta. Si por el contrario nos encontramos con niebla o nieve, la dificultad de seguir las marcas se amplía considerablemente ya que éstas están bastante separadas unas de las otras en las zonas donde el camino no está tan marcado por culpa del pasto que cubre el terreno, además en algunos casos las señales están casi a ras de suelo por lo que la nieve las puede tapar con facilidad.

Coordenadas UTM Datum WGS84

Perfil de la ruta

Cartografía, mapas y tracks

Este esquema de la ruta no está hecho a escala ni contiene toda la información relativa a la zona, es meramente orientativo.

Este esquema con el trayecto es aproximado y ha sido creado a partir de la base cartográfica derivada © Instituto Geográfico Nacional "Cuadrante 201-4 1:25.000"

Senditur ha manipulado los tracks para corregir los puntos aberrantes que pudieran existir, ocasionados por problemas con la recepción de la señal GPS. En cualquier caso los tracks son siempre aproximados. SENDITUR te anima al uso de las nuevas tecnologías a tu alcance, utilizándolas a modo de apoyo y consulta en tu actividad, no basando la realización y la orientación de la misma única y exclusivamente en ellas, ya que éstas pueden ver alterado su funcionamiento por muy diversas causas, no funcionando correctamente y llegando a no ser precisas sus indicaciones.