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GR 93 Tramo 3 Anguiano-Ortigosa de Cameros
(1)Del Valle del Najerilla al Valle del Iregua, entramos en Los Cameros
Dificultad-Moderada
4:55 h.
17,4 km.
Del Valle del Najerilla al Valle del Iregua, entramos en Los Cameros
Dificultad-Moderada
4:55 h.
17,4 km.
Podría decirse que el GR 93 es el principal sendero de La Rioja al surcarla de oeste a este uniendo valles, pueblos y comarcas mientras atraviesa las singulares montañas que delimitan el sur de la comunidad. Valles como el Valle del Najerilla desde donde parte esta ruta de senderismo para, siguiendo antiguos caminos, llevarnos hasta el otro lado de las montañas, hasta el Valle del Iregua en la comarca de Los Cameros Riojanos.
El GR 93 Tramo 3 Anguiano-Ortigosa de Cameros consta de 17,4 Km a través de bosques y montañas. El recorrido nos hace despedirnos de Anguiano y sus tres barrios, frontera entre la sierra y el valle del Ebro, para remontar las imponentes montañas que lo rodean. Montañas que nos regalan coloridos hayedos, como el de Aidillo, y verticales riscos, como los de Congostos, antes de coronar el techo de esta ruta a nuestra llegada al Collado de La Mohosa donde daremos el salto de vertiente al mismo tiempo que cambiamos de municipio. Un largo esfuerzo el del ascenso hasta este lugar que sin apenas dejarnos reponer las fuerzas nos meterá de lleno en la sinuosa senda que desciende en busca del arroyo del Castejón, el cual será el encargado de conducirnos hasta las mismas puertas de la localidad de Nieva de Cameros donde nos aguarda vigilante su maltrecho castillo. El GR 93 nos hará las veces de guía turístico por la localidad mientras prosigue con su imparable curso. La ermita de la Soledad se despide de nosotros mientras ponemos rumbo hacia la siguiente localidad de Los Cameros por la que vamos a pasar.
Lo diferente del paisaje nos hace parecer estar en otra ruta mientras salvamos la distancia que nos separa de El Rasillo de Cameros, con la vista puesta en la silueta del embalse que aquí se sitúa. La iglesia de Nuestra Señora de las Eras nos da la bienvenida a la localidad al mismo tiempo que emprendemos el recorrido por sus calles. Un recorrido que nos lleva a los mismos límites de El Rasillo de Cameros desde donde nos dispondremos a recorrer la parte final de esta ruta. Una parte final que transita entre bosques de esbeltos pinos que amenizan en parte las empinadas rampas que nos vamos encontrando en nuestro trayecto. El abrupto barranco de Rioseco es cuanto nos separa ya de nuestro objetivo, pero antes de enfrentarnos a él nos veremos tentados por el espectacular mundo subterráneo que albergan las Cuevas de Ortigosa, junto a cuya puerta pasaremos. Salvado ya el vertiginoso puente que une ambas orillas del vertical barranco nos espera la ermita de Santa Lucia, puerta de entrada del GR 93 en Ortigosa de Cameros, y al mismo tiempo punto y seguido de su trazado por La Rioja.
De no contar con el tiempo suficiente como para seguir las diferentes etapas con que cuenta el GR 93 o si por cualquier motivo tan solo queremos realizar este tramo en concreto y no contamos con varios vehículos para poder dejar uno al inicio y otro al final de la ruta, podemos aprovechar el servicio de transporte interurbano de La Rioja, ya que tanto Anguiano por un lado, como Nieva de Cameros, El Rasillo de Cameros y Ortigosa de Cameros por el otro, cuentan con líneas de autobús que las unen, diariamente y con diversos horarios, con Logroño capital, dándonos así la opción de realizar esta ruta sin tener que contar con varios coches.
Al municipio de Anguiano llegamos siguiendo la LR-113 que une Nájera con la burgalesa localidad de Salas de los Infantes. Esta misma carretera, en Nájera, comunica con la A-12, Autovía del Camino y con la N-120 entre Burgos y Logroño. También existe un amplio horario de autobuses interurbanos que unen a Anguiano tanto con Nájera, como con Logroño. Una vez allí en plena carretera que atraviesa la localidad encontraremos, a su salida de Anguiano dirección Monasterio de Valvanera, una zona de aparcamientos donde poder dejar nuestro vehículo.
Una ruta casi reservada para perros que estén acostumbrados a recorridos largos y exigentes. Atención en las zonas boscosas, es relativamente fácil si lo dejamos a su aire que termine despistándose, también tendremos que pasar un corto trozo de carretera donde habrá que extremar la precaución.
El agua inicialmente no tendría que ser un problema ya que en algunas zonas transitaremos cercanos a arroyos de fácil acceso e incluso alguno tendremos que vadearlos, además contaremos con las fuentes de los pueblos donde podremos rellenar las indispensables reservas que siempre debemos llevarle. También es importante que reponga energías a lo largo de la ruta.
El ganado es uno de los protagonistas junto a los perros que cuidan los rebaños y con los que es probable que nos encontremos, además hemos de pasar relativamente cerca de panales de abejas por lo que es importante estar atentos a nuestro perro.
Dejamos tras nosotros la carretera que atraviesa Anguiano (0h 00min) y que hace las veces de simbólica frontera entre el tramo del GR 93 de San Millán de la Cogolla y el que llega desde Nieva, para remontar la calle que da acceso al centro de la localidad.
Nada más hacerlo nos encontramos con unas escaleras que debemos subir en busca del comienzo del sendero.
El sendero comienza a ganar altura mientras nos acercamos a un típico cercado que impide el paso al ganado, el cual atravesaremos.
Continuamos ascendiendo, mientras vamos dejando atrás la villa de Anguiano.
Esta parte de la ruta remonta con fuerza la ladera de la montaña siguiendo el bien marcado sendero, en ocasiones algo descarnado.
Un vez más tendremos que atravesar otra portilla para el ganado, mientras, a nuestros pies quedan ya las casas que dan forma a esta localidad riojana.
A los pocos metros nuestra senda gira suavemente a la derecha para ir alejándonos con cada paso del cercado que nos acompañaba. Seguimos ganando altura, no sin esfuerzo, tomándonos algunos momentos de respiro con la excusa de echar un vistazo al paisaje que nos rodea.
Tras un buen rato la vegetación comienza a envolvernos aportándonos su inestimable sombra los meses de más calor. La hojarasca que cubre el suelo comienza a ponernos algo más difícil seguir el trazado correcto.
Serán varios los lugares donde deberemos estar atentos a las marcas para evitar seguir rumbos equivocados. Pero por suerte al poco rato el sendero se convierte casi en un amplio camino que deja bien a las claras su marcado trazado.
Casi al llegar al final de este bosque, por nuestra derecha se nos une el trazado de otro de los senderos que surcan estos montes. Juntos llegaremos hasta el Collado de La Tejera, ya fuera del bosque.
Aquí, además de despedirnos de la breve compañera que se nos acababa de unir, comenzaremos un relativo largo tramo de pista, eso sí, sin dejar de seguir ascendiendo.
De nuevo el bosque nos envolverá con su espesura ocultándonos el agreste paisaje que comienza a rodearnos.
Tras un tramo de relativa calma, en cuanto a desnivel se refiere, volveremos a tener que enfrentarnos a duras rampas que ascienden encajadas entre los cortados de Congostos. Atrás queda ya ésta agreste zona de bellos paisajes, mientras, afrontamos una de las zonas más exigentes de todo el recorrido.
Cuando parece que la pendiente llega a su final, nuestra ruta, vuelve a cambiar bruscamente de rumbo abandonando la amplia pista y continuando con el ascenso.
Ahora nos enfrentamos a un verde camino que remonta la ladera de la montaña encaminándonos hacia lo alto de la loma que tenemos frente a nosotros.
Nuestro camino desaparece dejándonos a merced de las marcas que señalizan el itinerario, si nos fijamos con atención también podremos ver la aparente senda que, serpenteante, salva este duro repecho.
Senda que al llegar a lo alto de la loma gira nuevamente para seguir ascendiendo hacia el cercano bosque.
Una vez en él nos espera un largo tramo que por el momento prosigue con el ascenso. Esta parte del recorrido, ya algo menos exigente, corta la ladera de la montaña siguiendo su sinuoso perfil.
No serán muchos los cruces que nos iremos encontrando y por suerte en todos ellos las señales del GR nos resuelven cualquier duda.
El ondulante trazado alterna zonas de frondoso bosque con otras más despejadas que nos permiten contemplar el paisaje que estamos surcando.
Nos veremos obligados a cruzar varios arroyos que corren ladera abajo.
Al rato nuestro sendero sale a un nuevo claro aquí tendremos que localizar frente a nosotros las marcas del GR que señalan la entrada del recorrido en otra zona del bosque. Zona que precede a nuestra llegada al punto donde daremos por finalizado este duro ascenso desde Anguiano.
La portilla metálica que separa los lindes de Anguiano y Nieva de Cameros nos avisa de nuestra llegada al Collado de La Mohosa.
Una vez superada comenzaremos el descenso que nos llevará hasta la siguiente localidad de La Rioja, por la que pasaremos. El bosque sigue siendo nuestros compañero y la hojarasca el tapete que casi nos oculta la senda que estamos siguiendo. Perdemos altura con relativa rapidez mientras avanzamos atentos a las marcas del GR.
Un nuevo arroyo se interpone en nuestro camino obligándonos a vadearlo para poder seguir el itinerario. El sendero, en ocasiones, más parece una torrentera por la que corre el agua los días lluviosos.
La frondosidad del bosque nos exige estar atentos para no saltarnos ninguno de los pequeños giros que realiza nuestra senda. Aunque como norma general el sendero está claramente pisado.
Ya casi al final del descenso un nuevo claro sale a nuestro encuentro, claro cuyo límite seguiremos para volver a retomar al otro lado la senda perdida al llegar a él.
Esta parte de la ruta es una sucesión de tramos boscosos y claros, en los que los postes y marcas del GR son los encargados de guiarnos al desaparecer en ellos la senda que veníamos siguiendo.
De nuevo la arbolada reclama su protagonismo al mismo tiempo que nos ofrece su sombra.
Pero rápidamente vuelve a dejar paso a una desnivelada majada en la que el recorrido gira radicalmente para descender bordeando el bosque del que acabamos de salir.
Casi al momento y tras un empinado descenso nos toparemos con la pista que nos ha de llevar hasta Nieva de Cameros.
Pista que por el momento no dejaremos por muchos cruces y caminos que nos encontremos. Ya con un perfil mucho más amable vamos avanzando por este cómodo camino sin que por el momento dejemos de perder altura.
Serán varios los cruces que iremos dejando tras nosotros mientras recorremos el curso descendente del arroyo del Trampal hasta que éste se une con el arroyo del Castejón el cual nos acompañará en adelante.
Las granjas y sus correspondientes edificaciones nos van avisando de la proximidad de la localidad hacia la que nos dirigimos. El valle parece ir poco a poco cerrándose como si no quisiera dejarnos salir de él.
Al rato llegaremos a una bifurcación de nuestro camino, momento de abandonarlo y comenzar el ascenso que nos llevará hasta Nieva de Cameros.
Ascenso cuyo desnivel se nos hace algo más duro de lo esperado, acostumbrados ya a progresar sin mayores exigencias. La silueta del malogrado castillo de Nieva nos recibe desde su privilegiada ubicación.
La localidad se muestra ante nosotros una vez finalizada esta dura rampa. El camino nos lleva directos al interior de la localidad sin hacernos apenas dudar del recorrido a seguir.
La plaza de Nieva de Cameros (3h 10min) recibe al GR 93, plaza que atravesaremos dirigiéndonos hacia su otro extremo.
El GR 93 sigue con su trazado por las calles de Nieva de Cameros, descendiendo en busca de la carretera que da acceso a la localidad.
Carretera que dejaremos a nuestra izquierda para comenzar un nuevo ascenso siguiendo la calle que bordea un cuidado parque.
Esta zona ajardinada nos acompañará, ahora sí, hasta los límites de Nieva de Cameros. Aquí, dejando atrás la ermita que jalona la zona ajardinada, comenzaremos un nuevo tramo de empedrado camino.
Esta parte del recorrido se torna en un rápido y vertiginoso descenso que nos lleva directos al reencuentro con la carretera que dejamos a un lado.
Ambos, carretera y camino, finalizan a la par al toparse con la carretera que se adentra en el valle en busca de la siguiente población que visita este GR 93. Nosotros nos tendremos que enfrentar a un corto pero peligroso tramo sobre el asfalto.
Por suerte rápidamente surge ante nosotros el camino por el que debemos continuar, abandonando la carretera.
A los pocos metros de camino nos toparemos con un nuevo desvío a nuestra izquierda, se trata de una corta senda que corta en diagonal la distancia que nos separa del nuevo camino que debemos seguir evitándonos así llegar hasta el cruce de éste con el que ahora llevamos.
Prácticamente al momento de pisar la nueva pista la abandonaremos para seguir la trocha que surca la base de los postes eléctricos.
Nos enfrentamos a un largo tramo de senda bien pisada que remonta suavemente parte de la altura antes perdida.
Serán varios los trazados y senderos con los que nos hemos de ir encontrando a lo largo de este tramo. Pero las marcas del GR y lo pisado de nuestro itinerario tendrían que ser suficientes referencias a seguir.
Al rato llegaremos a una amplia pradera que surcaremos por su lateral. Al final de este verde prado tendremos que vadear una especie de embarrado arroyo.
Nada más hacerlo nos cortará el paso una portilla para el ganado que tendremos que atravesar.
Al momento a nuestra derecha comienza un maltrecho y empinado camino por el que debemos continuar. Tras salvar este duro repecho nos espera una zona más cómoda y menos exigente.
De nuevo otro cruce de caminos sale a nuestro paso sin que debamos variar nuestro rumbo. Poco a poco la vegetación ira envolviéndonos a medida que nos vamos acercando a nuestro siguiente objetivo.
Ya metidos de lleno en el frondoso bosque podemos intuir la cercanía de la localidad que nos espera más adelante.
Antes de llegar a ella deberemos atravesar un cortafuegos que la precede. Después nuestro camino llega a su fin dejándonos al inicio de la urbanización con que nos recibe El Rasillo de Cameros.
.jpg "En el segundo cruce seguimos por la derecha")
Ahora deberemos recorrer la urbanización sin que por el momento variemos de rumbo. Pero antes afrontaremos el último tramo del descenso que lleva hasta la cercana carretera que tiempo atrás recorrimos, deberemos desviarnos y seguir por la derecha.
Esta nueva calle continua recorriendo la urbanización al mismo tiempo que nos muestra ya la localidad. Una nueva carretera nos cortara el paso al finalizar nuestra calle, carretera que tendremos que atravesar para seguir con nuestra ruta.
Este corto tramo de camino nos lleva directos a la pista asfaltada por la que entraremos definitivamente en El Rasillo de Cameros (4h 20min). Eso si no sin antes superar el desnivel y la distancia que aún nos separa del interior de la localidad.
Nos despedimos del singular árbol que crece desde hace cientos de años en plena plaza del El Rasillo de Cameros, para continuar nuestra andanza por la localidad.
Las típicas marcas del GR 93 nos ayudan en nuestro recorrido. Atrás queda también la fuente que jalona otra de las plazas con que cuenta esta villa de La Rioja.
Tras unos pocos metros siguiendo la carretera que da acceso a El Rasillo de Cameros la abandonaremos siguiendo el curso de una nueva calle.
Calle que nos conduce con rapidez hasta otra pequeña plazoleta que marca nuestra próxima marcha de esta localidad serrana. Tras pasar bajo la arcada de la casa que cierra esta plazoleta, comenzaremos a recorrer el corto tramo que nos sacará finalmente de la población.
Los carteles nos avisan de la distancia que aún nos queda por salvar, indicándonos a su vez lo habitual de este recorrido para las gentes que visitan la zona.
Este sendero a Ortigosa nos saca de El Rasillo de Cameros haciéndonos descender hasta el arroyo de San Mamed, cuyo cauce normalmente seco debemos cruzar para proseguir con nuestra ruta.
La pisada senda nos aleja con cada paso de la localidad que acabamos de visitar. No serán muchos los cruces o senderos con los que nos hemos de topar, en cualquier caso lo marcado del nuestro nos servirá de referencia a seguir.
Por delante nos espera un agradable paseo al amparo de la frondosa vegetación que puebla estos montes. El ondulante terreno nos obligará a salvar los escollos que va poniendo a nuestro paso.
Tras un suave descenso nos veremos obligados, como no podía ser de otra manera, a enfrentarnos a una dura rampa.
Por suerte este esfuerzo lo haremos protegidos por el frescor que aporta la sombra que envuelve al camino que estamos recorriendo.
Camino que ve cortado su trayectoria por la típica portilla para el ganado, la cual atravesaremos por su lateral. Ya salvado el desnivel y libres de los árboles que impedían contemplar el paisaje que nos rodeaba, podremos disfrutar de unas bellas panorámicas.
Comenzaremos entonces el descenso que nos acercará con cada paso al cercano final de este recorrido. Sin abandonar en ningún caso el amplio camino por el que vamos, llegaremos hasta la antigua cantera, hoy zona de recreo de Ortigosa de Cameros.
Al otro lado nos espera el paseo que llega desde la localidad.
Nada más ascender este corto repecho dejaremos atrás las taquillas de las famosas Cuevas de Ortigosa para aventurarnos a cruzar el vertiginoso puente que salva la garganta del arroyo de Rioseco. Ya al otro lado la ermita de Santa Lucia nos da la bienvenida a Ortigosa de Cameros (4h 55min).
Aunque en realidad si queremos adentrarnos en la localidad aún nos queda un corto trecho para ello, ya que al salir del recinto de la ermita finaliza este tramo del GR 93 y comienza el próximo rozando de soslayo esta localidad de La Rioja.
Distancia. 17,4KmTenemos varias localidades que bien pudieran ser final de ruta, acortando esta cifra.
Tiempo. 4:55hSin duda el paso por los diferentes pueblos que visitaremos a de aumentar esta cifra ya que todos ellos poseen grandes atractivos a los que merece la pena dedicar algo de tiempo.
Época del añoSin lugar a dudas los paisajes que observaremos son de gran belleza durante todo el año, aunque los bosques que atravesaremos y que nos rodearan en gran parte de la ruta aportan todo su esplendoroso colorido los meses de otoño y primavera. Atención si la nieve o la niebla hacen apto de presencia.
Material necesarioEl paso por las diferentes localidades que visita el GR 93 sin duda nos da cierto margen, pero no debe hacernos caer en el error de subestimar esta ruta. Ropa y calzado apropiados, preferiblemente bota, agua y comida suficiente para afrontar el esfuerzo y el desnivel al que nos someterá el trazado, un botiquín, protección contra el sol y lo necesario para poder consultar y seguir el rumbo en caso de duda, es lo mínimo que debemos llevar, todo ello por supuesto teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas que nos puedan afectar cuando realicemos el recorrido. Consulta nuestra lista de material y equipamiento para hacer senderismo. Leer Más.
Dificultad. ModeradaFísica
En condiciones normales este apartado es el que aporta la práctica totalidad de la dificultad que tiene esta ruta de senderismo en La Rioja. Su kilometraje y el desnivel que debemos afrontar requieren de una buena preparación física, además de saber dosificar las fuerzas en la primera parte de la ruta.
Severidad del medio
Con largos tramos por camino y con sendas que por lo general los mayores escollos que nos van a poner son los tramos de barro que podemos encontrarnos en ellas, la ruta no presenta zonas complicadas o expuestas, eso sí siempre que respetemos su trazado y no busquemos itinerarios alternativos. Aun así no estaremos exentos de algún que otro posible resbalón en las diferentes rampas que tendremos que pasar.
Orientación
Por lo general bien señalizado, serán las zonas de majadas y los tramos de bosque en los que la senda se desdibuja donde mayores complicaciones podremos encontrar. La zona de Anguiano cuenta con la señalización adicional de su entramado de senderos locales conocidos como Rutas entre Hayedos, cuyas marcas nos acompañarán hasta el Collado de La Mohosa, marcas que no deben confundirnos ya que su colorido, el naranja, en algunos casos puede asemejarse al del GR.
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| 1-Anguiano | 0:00h | 644m | 0Km | 30T 519228 4678551 |
| 2-Nieva de Cameros | 3:10h | 1012m | 11,3Km | 30T 527448 4674114 |
| 3-El Rasillo de Cameros | 4:20h | 1095m | 15,3Km | 30T 524991 4671476 |
| 4-Ortigosa de Cameros | 4:55h | 1065m | 17,4Km | 30T 524692 4669625 |
Coordenadas UTM Datum WGS84
Desnivel: 1771m
Desnivel +: 1088m
Desnivel -: 683m
Altitud máxima: 1300m
Altitud mínima: 644m
Este esquema de la ruta no está hecho a escala ni contiene toda la información relativa a la zona, es meramente orientativo.
Este esquema con el trayecto es aproximado y ha sido creado a partir de la base cartográfica derivada © Instituto Geográfico Nacional "Cuadrante 241-2, 241-4, 241-1 y 241-3, 1:25.000"
Senditur ha manipulado los tracks para corregir los puntos aberrantes que pudieran existir, ocasionados por problemas con la recepción de la señal GPS. En cualquier caso los tracks son siempre aproximados. SENDITUR te anima al uso de las nuevas tecnologías a tu alcance, utilizándolas a modo de apoyo y consulta en tu actividad, no basando la realización y la orientación de la misma única y exclusivamente en ellas, ya que éstas pueden ver alterado su funcionamiento por muy diversas causas, no funcionando correctamente y llegando a no ser precisas sus indicaciones.
Preciosa marcha que une Anguiano con Nieva y Ortigosa a través de la Sierra del Camero Nuevo...Nosotros hicimos un ida y vuelta Anguiano/Nieva y nos gusto mucho.
Lugar de emplazamiento de la Virgen de Valvanera, Patrona de La Rioja
Cuna del Castellano y panteón de los siete héroes castellanos
Calle Niceto Rubio, 1
941462299
Descubre qué ver en...
¿Sabías que…
A partir de El Rasillo de Cameros y hasta bien pasado Ortigosa de Cameros el trazado del GR 93 coincide con la Vía Romana del Iregua, la cual en época de los romanos unía las villas de Vareia en Logroño (hoy Varea) y Numancia cerca de Soria. Aunque exactamente se desconoce su trazado original, existen indicios históricos que acreditan su existencia y que en parte abalan el entramado de senderos que hoy en día la recuerdan.
No te pierdas…
Los árboles singulares de La Rioja que se pueden ver en esta ruta, uno de ellos es el Tejo Milenario de Anguiano, lo podrás ver en su solitario emplazamiento, al llegar a lo alto de la loma a la que se asciende tras dejar el tramo de pista que pasa por Congostos, justo en los riscos que se sitúan frente a nosotros. El otro, más cercano, es el Olmo de El Rasillo de Cameros que nos recibe en la plaza de la iglesia al GR 93 a su llegada a la localidad.
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Esta ruta ha sido realizada sobre el terreno por SENDITUR el 02-07-2017. La ruta puede variar mucho en función de la época del año, de las condiciones meteorológicas y del terreno, así como por las acciones de terceros y de la evolución sufrida por el medio natural donde se ubica. Todas las opiniones, consejos y/o valoraciones realizadas por SENDITUR en sus descripciones son a título orientativo y están sujetas y/o se refieren a las condiciones específicas del día concreto de la realización del recorrido, refiriéndose a ese día en concreto, tomando como referencia a personas entrenadas y con la debida experiencia, con un nivel alto de preparación tanto física como técnica, además de correctamente equipadas.
Todos los tiempos son aproximados y toman un carácter orientativo, no se han tenido en cuenta las paradas por pequeñas que sean. Toda la información relacionada con la ruta, textos, imágenes, vídeos, mapas, esquemas, tracks, poblaciones, y lugares de interés turístico están publicadas a título orientativo, pudiendo no coincidir con el estado actual de cada lugar. Antes de realizar cualquier actividad, valora tus conocimientos técnicos, tú forma física, infórmate sobre la meteorología y las variaciones que hubiera podido sufrir la ruta, equípate correctamente, sé prudente y responsable en todo momento, no sobrepasando tus capacidades. Igualmente, te animamos a documentarte con libros y guías especializadas para complementar la información descrita. SENDITUR no se responsabiliza de cualquier mal uso o uso inadecuado de las guías comprensivas de sus rutas y/o publicaciones así como del de sus guías electrónicas, ni de las variaciones por los motivos antes referidos que pudiera haber de sus descripciones y recomienda que cada uno sea responsable y prudente en la realización de la actividad.
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