Estella Monumental

Qué ver en Estella - Lizarra

Estella - Lizarra, una de las protagonistas indiscutibles de la historia de Navarra. Atesora como pocas, muestras indiscutibles de su importante pasado, ligado al devenir de un poderoso reino que junto a la más importante vía de peregrinación de Europa, el Camino de Santiago, dejaron una imborrable huella, no solo en la ciudad sino también en sus gentes. La ciudad crece entorno a uno de los meandros que forma el río Ega, buscando la protección de éste y de los cerros donde se asentaban sus primeros habitantes.

Propuesta de itinerario para visitar Estella

El itinerario de Estella Monumental nos transporta de época en época, contemplando las huellas indelebles que aquí dejaron las diferentes gentes que forman parte de la historia de Estella - Lizarra. Recorrerla es sumergirte en parte de la historia que nos rodea a cada paso, historia que aún sigue viva como así lo atestiguan los miles de peregrinos que surcan sus calles todos los años. Iglesias, palacios, castillos o puentes, testigos no tan mudos que nos contarán los hechos que en ellos acontecieron, aportando un especial simbolismo al ya de por si importante patrimonio cultural que Estella - Lizarra brinda al visitante.

Iglesia de San Pedro de la Rúa

La Plaza de San Martín desde donde podremos contemplar la inconfundible silueta de la Iglesia de San Pedro de la Rúa, iglesia mayor de la ciudad desde el siglo XIII, es el punto de partida de este recorrido que nos hará retroceder en el tiempo siguiendo parte de la historia de Estella/Lizarra presente en sus calles y monumentos. La característica torre de la iglesia, visible desde diferentes puntos de la ciudad, y la más reciente escalinata que da acceso al templo desde la misma plaza, son un claro ejemplo de la gran variedad de estilos que nos vamos a encontrar al visitar este ilustre edifico. De su exterior nos sorprende su verticalidad, aumentada por su posición y la altura de su torre abierta en su parte inferior por una ventana de estilo gótico. En su interior podremos contemplar su bonito claustro con, al igual que el del Monasterio de Santo Domingo de Silos, un capitel doble formado por dos columnas torsionadas entre si, o la pila bautismal de finales del siglo XII que entre otras muchas obras dan testimonio de la importancia que durante diferentes periodos ha tenido esta iglesia en el devenir de la historia de Estella/Lizarra y de Navarra.

Iglesia del Santo Sepulcro

Despidiéndonos por ahora de la Plaza de San Martín y de los monumentos que allí se sitúan, a los que volveremos al final del recorrido, nos dirigimos hacia nuestra próxima parada siguiendo en sentido inverso el discurrir que dibuja el Camino de Santiago a su paso por la localidad. A nuestro paso nos vamos dejando atrás nobles casas que aun hoy conservan su regio aspecto, como el Palacio del Gobernador o el Palacio de los San Cristóbal. El río Ega, que divide la ciudad en los diferentes barrios que la forman, nos acompaña sin que casi lo percibamos hasta las afueras de Estella, donde nos encontraremos con la imponente fachada de la Iglesia del Santo Sepulcro. Comenzada a construir en el siglo XII, de esta época arquitectónicamente hablando solo se puede apreciar el estilo semicircular de la nave del Evangelio, mientras que el resto del edifico presenta un claro predominio del estilo gótico. Su portada, exuberantemente ornamentada, es la primera imagen que los peregrinos tienen al llegar hasta Estella/Lizarra, obligándoles a parar su camino para dedicar el tiempo necesario en contemplar las tres escenas de la Resurrección de Cristo que se representan en ella.

Puente Picudo

Convertidos por un instante en peregrinos retomamos el Camino que nos trajo hasta aquí con la vista puesta en la fachada del Convento de Santo Domingo, fundado por Teobaldo II allí por el 1.259 y que junto a la iglesia de Santa María Jus del Castillo formaban parte de una de las más importantes Juderías del Reyno de Navarra. Esta antigua judería sufrió un asalto en 1.328 y años antes había visto como su sinagoga, la actual iglesia de Santa María Jus del Castillo, pasaba a ser consagrada como iglesia de Todos los Santos. Hoy en día esta iglesia alberga el centro de interpretación del Románico y del Camino de Santiago. Regresamos al Camino para, a las puertas de la Rúa por la que salimos de la Plaza de San Martín, encontrarnos con otro de los hitos de Estella, el Puente de la Cárcel o Puente Picudo como se le conoce popularmente. Asentado sobre los cimientos del antiguo puente románico volado por los liberales en la 3º Guerra Carlista, sorprende su desnivel el cual estamos obligados a salvar para proseguir el curso de nuestra ruta, viendo recompensado el esfuerzo por la panorámica que desde su puntiagudo centro disfrutaremos.

Iglesia de San Miguel

Descendemos el empinado puente para adentrarnos definitivamente en el casco histórico de Estella, rúas y estrechos pasajes que acogen el bullicio diario que da vida a esta ciudad y que nos acompañará en buena parte del recorrido. A la iglesia de San Miguel podemos acceder por alguna de las escalinatas que llegan hasta ella desde la Plaza Mercado Viejo o desde la Calle Zapatería, en ambos casos no podemos dejar de contemplar la impresionante portada norte de la iglesia cuyos capiteles o el Pantocrátor del Tímpano forman parte de una verdadera joya arquitectónica del románico. En su interior descubriremos diferentes obras como los retablos y desde su exterior dispondremos, gracias a su elevada situación, de una privilegiada fotografía de Estella.

Iglesia de San Juan

Dejamos tras nosotros la iglesia de San Miguel para continuar nuestro periplo por la ciudad, recorriendo su calle Mayor que nos acerca paso a paso hasta las proximidades de la Plaza de los Fueros, que junto a su vecina, la Plaza de Santiago, son el verdadero corazón de Estella. Esta plaza alberga todos los jueves del año uno de los mercadillos más concurridos de la región en el que se pueden encontrar productos típicos de la tierra y artesanales. Aquí se ubica la iglesia de San Juan, un claro exponente de como los diferentes estilos arquitectónicos han puesto su sello en esta ciudad. El edificio original se construyó a finales del siglo XIII y de él solo queda la portada de la nave del Evangelio, mientras que su fachada principal es de estilo neoclásico debido al hundimiento que sufrió la bóveda y su torre que obligó a su reconstrucción. Además en su fachada sur podremos encontrar una portada de estilo gótico que completa la variedad arquitectónica del edificio.

Basílica del Puy

Desde la misma Plaza de los Fueros emprendemos el ascenso hacia el altozano donde se ubica el templo que acoge a la patrona de Estella, la Virgen del Puy, que como bien indica su nombre en Francés, se sitúa en un cerro o altozano, donde según reza la tradición unos pastores descubrieron la imagen de la Virgen gracias a las estrellas que indicaban el lugar exacto. Siguiendo la calle Don García Jiménez nos encaminaremos a superar el desnivel que nos separa de la basílica, ayudados en parte por los ascensores que superan los desniveles que separan las calles que tenemos que atravesar. A buen seguro al final de este tramo de ascensores llamará nuestra atención la maltrecha Iglesia de San Pedro de Lizarra, cuya torre nos permite hacernos una idea de la historia que este templo tiene, como así atestigua la estela romana que en él se encuentra. No habiéndonos podido la paciencia, bordeamos esta iglesia para proseguir con el ascenso que ahora sin ayudas mecánicas nos lleva hasta la misma puerta de la Basílica del Puy. Del actual edificio de formas neogóticas que se alza sobre una planta en forma de estrella, llama la atención la especial iluminación de su interior así como la talla de la Virgen del Puy chapeada en plata.

Palacio de los Reyes de Navarra

Desde uno de los puntos más altos de la ciudad descendemos siguiendo los pasos que nos trajeron hasta aquí desde la Plaza de los Fueros para desde allí proseguir el camino por el Paseo de la Inmaculada que nos llevará a pasar junto al edifico del ayuntamiento. El río Ega vuelve a reclamar su protagonismo al tiempo que cruzamos sobre él siguiendo el Puente del Azucarero que nos lleva directamente hasta la Plaza de San Martín, punto de partida de este recorrido y donde nos espera el antiguo Palacio de Justicia, antiguo Ayuntamiento y la conocida Fuente de los Chorros, que junto a la Iglesia de San Pedro de la Rúa y al Palacio de los Reyes de Navarra forman un de las más impresionantes composiciones de toda Estella. El Palacio de los Reyes de Navarra también conocido como Palacio de los Duques de Granada de Ega, fue construido en la segunda mitad del siglo XII y actualmente está acondicionado como Museo. En su fachada podemos revivir pasajes de la lucha entre el paladín de Carlomagno, Roldán y el gigante Ferragut, siendo el punto y seguido ideal desde el que adentrarnos aún más en Estella para conocer los lugares que todavía guarda en su interior.

Mapa de la ruta

Este mapa es un croquis hecho como ejemplo de la ruta, en ningún caso representa el mejor o el único itinerario a seguir. En su desarrollo no se han tenido en cuenta las normas vigentes de circulación o el estado de los lugares por donde pasa y que pudieran afectar a su trazado.