A los pies de la sierra de La Demanda, recorriendo la frontera que separa esta sierra de La Demanda del valle del Najerilla que fluye hacia el cercano y amplio valle del Ebro, encontramos la Ruta de San Quiles. Esta ruta senderista de La Rioja asciende desde la localidad de Matute hasta la cima de San Quirico siguiendo el itinerario de la tradicional romería que todos los años realizan los habitantes de Matute, portando la figura del pequeño Santo, hasta la cima de la montaña donde se ubica la ermita de San Quiles.
La ruta de San Quiles con 12,2 Km parte desde Matute donde podremos visitar su iglesia de San Román o recorrer sus calles para descubrir sus flamantes casas indianas o los escudos que portan algunos de los edificios con más historia de la localidad. Las imponentes peñas bajo las que se ubica Matute son el hábitat escogido por innumerables especies animales como por ejemplo el buitre común, el búho real o el halcón peregrino. La Ruta de San Quiles nos transportará en su primera parte por este paraje de gran valor natural, donde coincide con la Senda del Salto del Agua que se adentra aún más en estos sombríos barrancos. Nuestra ruta por el contrario asciende por la ladera de la montaña permitiéndonos disfrutar, a cambio del sobresfuerzo, de unas magníficas panorámicas del valle y de la sierra. La ruta nos acerca hasta parajes como el de Londeperro, una verde pradera donde recuperar fuerzas para afrontar un nuevo ascenso hasta los límites de la majada que marca la entrada al hayedo en el que nos adentraremos. Es en este punto donde debemos despedirnos de otro de los trazados que nos han acompañado hasta aquí, se trata de la Ruta de Tres Villas que prosigue su curso hacia Anguiano. El frondoso hayedo nos envuelve en esta parte de la ruta en la que el desnivel se hace un poco más notable mientras serpenteamos entre los árboles por la ladera de la montaña.
Si estamos atentos y la hojarasca lo permite, podremos descubrir el manantial de Las Canales, que mana prácticamente a ras de suelo, poco antes de salir del hayedo que estamos recorriendo. Una pequeña pausa en la frondosidad del trazado nos permitirá contemplar el camino recorrido y la magnitud de la altura ganada. Nuevamente en el interior del bosque la ruta nos seguirá exigiendo un notable esfuerzo para salvar el desnivel que aún nos separa de la cima. Los árboles, poco a poco dejan paso a una empedrada trocha que nos encarama por el hombro de la montaña hasta la misma pradera que alberga la ermita de San Quiles y la cima de la montaña. Una vez culminada la romería hasta la ermita del patrón de Matute tendremos que decidir si regresar por el mismo lugar o por el contrario poner rumbo hacia el Collado Cervanco, donde nos aguarda el punto y seguido de esta Ruta de San Quiles. Los que se animen a seguir podrán contemplar, por un lado el cordal montañoso que desde Peñalba se alarga hacia el valle del Najerilla y por el otro la localidad de Anguiano en el fondo del valle. El Collado Cervanco nos brinda la posibilidad de enlazar esta Ruta de San Quiles con la Ruta de Tres Villas e incluso con la Ruta de Valvanera, ampliando así no solo el kilometraje si no también la belleza que ya de por si tiene este recorrido.
Cuenta la leyenda que hace ya muchos años, cuando las imágenes de Santa Julita y San Quirico permanecían en la ermita de la cima de San Quiles, un noble señor conocedor de lo milagroso para las calenturas que es el pequeño San Quirico lo bajó hasta su casa en el valle pidiéndole por su hija que estaba enferma. Ésta sanó y el noble señor, feliz por ver sanar a su hija, decidió dejar al Santo en la iglesia del pueblo no devolviendo al pequeño Quirico con su madre. Pasó el tiempo y una serie de atronadoras y devastadoras tormentas azotaron sin cesar el pueblo. Los lugareños aterrados por la virulencia de estas tormentas acordaron llevar en romería la figura de San Quirico hasta la ermita para que visitara a su madre, cesando entonces las tormentas. Romería que repitieron año tras año para que Quirico pudiera reunirse con su madre Julita.
El acceso a la villa de Matute, a 16 Km de Nájera, se efectúa por la carretera local LR-432 de Bobadilla a Tobía. Siguiendo la LR-113 que une las localidades de Nájera y Salas de los Infantes llegaremos a Bobadilla, donde está el desvió que nos conduce hasta Matute. La inconfundible silueta de las Peñas de Matute y Tobía nos sirve de referencia, una vez tomado el desvío, recorriendo parte de la Ruta de los Monasterios, tendremos que dejar esta carretera para girar, dirigiéndonos hacia estas peñas donde en su base se sitúa Matute. El servicio diario de autobús de línea, que comunica las localidades de la comarca con Nájera, también tiene parada en Matute. Una vez allí tan solo tendremos que adentrarnos en la localidad siguiendo la calle que la comunica con la carretera. Esta calle nos lleva directos hasta la plaza de la iglesia donde podremos dejar nuestro vehículo.
Recorrido exigente por su desnivel que se desarrolla principalmente por sendas y prados, aconsejable no darle demasiado margen para evitar esfuerzos innecesarios e incluso posibles extravíos.
A priori solo dispondremos de puntos de agua al inicio de la ruta por lo que es recomendable llevar algo de agua y comida extra.
Esta ruta de senderismo se desarrolla por un espacio de especial valor ecológico, hábitat elegido por diferentes especies de aves y mamíferos, no siendo raro encontrárselos. El ganado, aunque en menos cantidad, también es un habitual de las majadas. En el inicio de la ruta tampoco es raro encontrarse con los perros que habitan en esta zona.
La plaza de la iglesia de San Román, en Matute (0h 00min), es el punto de partida de esta ascensión a San Quiles.
Seguimos el curso de la calle Mayor dejando atrás la iglesia y los carteles informativos de los itinerarios que tenemos disponibles. En esta parte del recorrido coinciden en su trazado la Ruta de San Quiles, la Senda del Salto del Agua y la Ruta de Tres Villas.
Rápidamente dejamos la calle Mayor para comenzar el ascenso que nos sacará de Matute siguiendo las marcas, que por duplicado, nos señalizan el itinerario.
Ya sin más desvíos, la calle Orive es la encargada de guiarnos a través de la localidad. Las casas van cediendo terreno y pronto nos veremos sorprendidos por el abrupto paisaje que tenemos por delante.
Dejamos a nuestra espalda Matute para continuar ascendiendo suavemente, ahora ya por una amplia pista de tierra que nos hace pasar junto a un cercado para el ganado.
Poco después de dejar atrás este cercado, en plena curva, abandonamos la pista por la que vamos para comenzar un rápido descenso que nos hace perder la altura ganada.
El camino por el que descendemos deja paso a una senda acondicionada con escalones que nos lleva hasta el fondo del valle.
Al finalizar esta zona de escalones el recorrido continúa remontando el barranco siguiendo el curso que le marca una pequeña acequia de riego. El arroyo de Rigüelo nos acompaña por unos metros a la par que nos adentramos entre las colosales peñas que se alzan sobre nuestras cabezas.
Atravesamos una portilla de madera para poco después cruzar el arroyo y recorrer los últimos metros en los que coincidiremos con el arroyo.
Nada más salir a un pequeño claro nuestro recorrido gira en redondo, despidiéndose de la Senda del Salto del Agua, para comenzar el verdadero ascenso a San Quiles. Una enriscada senda nos lleva rápidamente hasta una amplia majada.
Nada más llegar, a nuestra derecha vemos los postes que nos obligan a ascender por el prado para coger el hombro de la montaña.
Seguimos ganando altura con rapidez al mismo tiempo que disfrutamos del espectacular paisaje que nos rodea.
La trocha por la que vamos nos conduce hacia unas solitarias peñas que a nuestra salida de Matute veíamos a la izquierda en la ladera de la montaña. Bordeamos esta peña por su izquierda para proseguir con el ascenso.
En esta parte de la ruta avanzamos encajados entre el hombro de la montaña, a nuestra derecha, y un cercado metálico a la izquierda.
La senda, algo difuminada en algunas zonas, se divide en más de una ocasión obligándonos a estar atentos a las marcas del recorrido para evitar despistes o esfuerzos innecesarios.
Avanzamos a media ladera al mismo tiempo que el cercado va separándose de nosotros con cada paso. Unas solitarias encinas sobre el hombro de la montaña nos sirven de referencia en caso de duda, ya que el sendero prosigue su curso ascendente dejándolas a nuestra derecha.
El desnivel, ya menos exigente, y la senda algo más marcada nos dan un respiro que nos permite recuperar las fuerzas necesarias para el siguiente duro repecho que nos espera.
Llegamos al collado de La Pala, donde coinciden varios caminos, aquí remontamos los pocos metros que nos separan del hombro de la montaña.
Por delante nos espera un duro y escarpado tramo por el que seguiremos ganado altura. La descarnada senda nos conduce hacia una solitaria encina para bordear un primer cerro.
Casi al momento tendremos que abandonar la marcada senda por la que vamos para dirigirnos hacia la cima de un segundo cerro y volver a ganar el hombro de la montaña.
Este tramo, lleno de sendas más o menos marcadas, continua haciéndonos ganar altura no sin esfuerzo. Una vez superado este empedrado escollo el recorrido sigue su curso llevándonos hasta una amplia majada.
Frente a nosotros ya podemos observar la línea de árboles que marcan la entrada al hayedo (1h 00min) y el punto donde se despiden la Ruta de San Quiles y la Ruta de Tres Villas. En el collado de Londeperro, además de separarse la ruta de Tres Villas y la nuestra también es el lugar donde llega la variante de Tres Villas. Un bonito itinerario que llega desde el paraje de La Cubilla, acortando así considerablemente el trazado original de Tres Villas y brindándonos la posibilidad de regresar por él si desde la cima de San Quiles continuamos hasta el collado Cervanco, descendiendo después hasta La Cubilla y regresando por esta variante hasta aquí para luego bajar hacia Matute realizando así una ruta de 14 Km aproximadamente.
Seguimos recto introduciéndonos en el hayedo, dejando a nuestra izquierda la senda por la que continua la Ruta de Tres Villas. El paisaje cambia radicalmente al adentrarnos en el frondoso hayedo.
El ascenso no da tregua y continua haciéndonos ganar altura mientras cortamos la ladera de la montaña.
La senda se abre paso entre los árboles obligándonos a enfrentarnos a alguna dura rampa que junto al barro, que a buen seguro encontraremos según la época del año, nos exigen un esfuerzo extra para avanzar.
El itinerario serpentea por la ladera de la montaña buscando hacer más llevadero el desnivel a salvar. Nuestra senda nos conduce nuevamente al exterior del bosque haciéndonos creer que estamos a escasos metros de la cumbre.
Nada más lejos de la realidad, tras ascender unos cuantos metros más y poco antes de llegar hasta un solitario árbol, la ruta gira bruscamente a nuestra derecha para encaminarnos nuevamente hacia el interior del hayedo.
Al entrar en el frondoso bosque el desnivel vuelve a hacerse más exigente y la senda que seguimos gana altura con rapidez.
La hojarasca casi oculta el trazado a seguir mientras la arboleda va cediendo espacio poco a poco. Nos acercamos a los límites del bosque y afrontamos un bonito tramo rocoso que nos conduce hasta el hombro de la montaña.
El sendero vuelve a cambiar de orientación para afrontar el empedrado tramo final del ascenso. San Quiles nos espera, pero todavía nos resta un exigente ascenso ya sin la protección de los árboles.
El largo hombro final nos conduce hasta la amplia majada que hace las veces de cima. Nada más llegar a ella, a nuestra derecha, ya podemos contemplar la silueta de la ermita de San Quirico o San Quiles hacia la que nos dirigimos.
La cima de San Quiles (2h 00min) nos regala unas imponentes vistas los días despejados.
Una vez disfrutado del entorno que nos rodea proseguimos la marcha, cabe la posibilidad de regresar a Matute (1h 15min desde aquí) volviendo tras nuestros pasos y realizar una ruta de 8,5 Km o alargar el recorrido acercándonos hasta el Collado Cervanco, punto de unión con más recorridos pertenecientes a las Rutas entre Hayedos, como son la Ruta de Tres Villas o la Ruta de Valvanera.
Si nos decidimos por esta opción, la ruta, tomando como referencia la puerta de la ermita, comienza el descenso rumbo O-SO, dejando a la derecha la senda por la que llegamos hasta la ermita.
Recorremos la majada perdiendo altura poco a poco encaminados hacia la ladera de la montaña donde encontraremos la empedrada trocha por la que seguiremos el descenso hasta el collado del Serradal.
En este tramo del descenso nos toparemos con varias trochas que parecen llevarnos hasta este collado, cada una con su peculiar trazado.
Una vez en el collado nos toca volver a ganar algo de altura mientras seguimos, esta vez sí, una más marcada senda.
Rápidamente saltamos la montaña y nos vemos recorriendo la ladera contraria a la que habíamos llevado hasta el momento. La estrecha senda recorre una zona de arbustos y matorrales al mismo tiempo que nos hace perder altura cómodamente.
Al rato nuestra senda llega a su final al toparse con un camino por el cual si así lo deseamos podemos seguir hacia el collado Cervanco. Y es que al otro lado nos espera una nueva trocha por la que nos encaminan las marcas de la ruta.
Esta trocha desciende rápidamente para llevarnos sin más desvíos hasta el collado Cervanco (2h25min). Una vez aquí podemos regresar a Matute (4h 05min) sobre nuestros pasos y finalizar así la ruta o seguir algunas de los recorridos que aquí convergen y que nos llevarán hasta Tobía y Matute o hasta Anguiano por la Ruta de Tres Villas o bien a Valvanera por la ruta que lleva su nombre.
Esta cifra cambiará según sea nuestro itinerario de regreso.
Este tiempo corresponde a la ruta completa, ida y vuelta entre Matute y Cervanco, si modificamos el trazado propuesto el tiempo necesario variará tanto a favor como en contra en función de la ruta que sigamos.
Si disponemos de una buena visibilidad esta ruta nos ofrece el valor añadido del espectacular paisaje que ofrece a lo largo de gran parte del recorrido. Por descontado, el otoño y la primavera ofrecen su especial colorido como aliciente al bonito trazado de esta ruta. Por el contrario el invierno, o mejor dicho la nieve aumentan la dificultad del recorrido pero a cambio nos ofrece un singular paisaje reservado a montañeros.
Aunque por su altura no lo parezca estamos frente a una ascensión a una montaña que es la frontera entre el valle y la sierra por lo que el clima puede cambiar rápidamente. Botas de trekking, bastones, ropa de abrigo, comida y agua son compañeros que no pueden faltarnos en esta ruta de senderismo. Protección contra el sol, gafas, gorro, crema… tampoco debemos dejarla en casa, aunque sea invierno, época en la que la nieve suele hacer acto de presencia obligándonos a adecuar nuestro equipamiento a estas condiciones de la ruta. Consulta nuestra lista de material y equipamiento para hacer senderismo. Leer Más.
Física
El desnivel a salvar en la relativa corta distancia en la que lo debemos hacer es sin duda la mayor exigencia física a la que nos enfrentaremos, aunque tomándonos la ruta con la suficiente calma no debiera plantear ningún problema a alguien acostumbrado a este tipo de terrenos. La ventaja de poder ampliar o reducir el trazado total de la ruta juega a nuestro favor permitiéndonos adaptarla a las características de cada uno.
Severidad del medio
No debemos olvidar que estamos en un medio natural cambiante y que no podemos controlar. Aun así la ruta no presenta mayores complicaciones, en condiciones normales, que el barro que podemos encontrar en algunas zonas del trazado, sobre todo en el hayedo. Otra zona donde debemos prestar atención es en la bajada de la ermita hacia Cervanco, discurre por la empedrada ladera de la montaña donde estamos expuestos a resbalones, sobre todo si no seguimos la senda correcta. Mucha atención con salirnos del trazado, estamos recorriendo una zona montañosa de verticales peñas y profundos barrancos que flanquean gran parte de la ruta.
Orientación
Al inicio de la ruta coinciden la señalización amarilla y naranja de las Rutas entre Hayedos con la blanca y morada de la Senda del Agua. Además también coincidimos con el trazado de la Ruta de Tres Villas por lo que tenemos que tener claro las marcas e itinerario a seguir. El tramo de ascenso hasta la entrada al hayedo donde se separan ambas rutas es el que más quebraderos de cabeza nos puede dar, ya que son bastantes las sendas que parecen llevar el mismo rumbo y no seguir la correcta nos puede hacer asumir un sobresfuerzo innecesario. Además la senda en esta parte de la ruta tiene zonas en las que no está muy marcada, llegando casi a difuminarse en la hierba. Otro punto donde nos puede costar encontrar el trazado correcto es al inicio del tramo entre la ermita de San Quiles y el Collado de Cervanco, ya que hasta que no estemos casi a media ladera no veremos la senda por la que tenemos que seguir.
1-Matute | 0:00h | 682m | 0Km | 30T 516877 4682920 |
2-Entrada al hayedo | 1:00h | 1005m | 2,6Km | 30T 517185 4680979 |
3-San Quiles | 2:00h | 1342m | 4,2Km | 30T 517181 4680193 |
4-Collado Cervanco | 2:25h | 1225m | 6,1Km | 30T 515718 4679436 |
5-San Quiles | 3:15h | 1342m | 8Km | 30T 517181 4680193 |
6-Entrada al hayedo | 3:35h | 1005m | 9,6Km | 30T 517185 4680979 |
7-Matute | 4:05h | 682m | 12,2Km | 30T 516877 4682920 |
Coordenadas UTM Datum WGS84
Desnivel: 1900m
Desnivel +: 950m
Desnivel -: 950m
Altitud máxima: 1342m
Altitud mínima: 682m
Este esquema de la ruta no está hecho a escala ni contiene toda la información relativa a la zona, es meramente orientativo.
Este esquema con el trayecto es aproximado y ha sido creado a partir de la base cartográfica derivada © Instituto Geográfico Nacional "Cuadrante 241-1, 1:25.000"
Senditur ha manipulado los tracks para corregir los puntos aberrantes que pudieran existir, ocasionados por problemas con la recepción de la señal GPS. En cualquier caso los tracks son siempre aproximados. SENDITUR te anima al uso de las nuevas tecnologías a tu alcance, utilizándolas a modo de apoyo y consulta en tu actividad, no basando la realización y la orientación de la misma única y exclusivamente en ellas, ya que éstas pueden ver alterado su funcionamiento por muy diversas causas, no funcionando correctamente y llegando a no ser precisas sus indicaciones.
¿Sabías que…
San Quiles, también conocido como Quirico o Quirce, era hijo de Santa Julita, ambos vivieron allá por el año 300 d.C. Según relatan los libros fueron hechos presos como consecuencia de su fe cristiana y al ver el martirio al que era sometida su madre el pequeño Quirico declaró abiertamente su fe costándole a él también la vida.
No te pierdas…
Justo al comenzar la parte final del ascenso, al llegar al hombro rocoso que precede a la cima, cuando la senda cambia bruscamente de rumbo, podemos dejar por un instante la ruta y seguir unos pocos metros recto dejando atrás la senda, enseguida saldremos a una pequeña antecima rocosa desde donde dispondremos de unas magníficas vistas de la sierra de La Demanda.
Desde el compromiso de SENDITUR con la Naturaleza, el respeto y el equilibrio del medioambiente, SENDITUR te insta a viajar de una forma responsable, con bajo impacto ambiental y respetando en todo momento el entorno Natural, Cultural y Social de allí por donde pases.
Además de compartir con todos nosotros tu experiencia en la ruta te agradeceríamos que nos escribieras para informarnos de cualquier dato erróneo o no actualizado que hayas encontrado, o simplemente para hacernos llegar tu opinión a Muchas Gracias.
Esta ruta ha sido realizada sobre el terreno por SENDITUR el 10-04-2016. La ruta puede variar mucho en función de la época del año, de las condiciones meteorológicas y del terreno, así como por las acciones de terceros y de la evolución sufrida por el medio natural donde se ubica. Todas las opiniones, consejos y/o valoraciones realizadas por SENDITUR en sus descripciones son a título orientativo y están sujetas y/o se refieren a las condiciones específicas del día concreto de la realización del recorrido, refiriéndose a ese día en concreto, tomando como referencia a personas entrenadas y con la debida experiencia, con un nivel alto de preparación tanto física como técnica, además de correctamente equipadas.
Todos los tiempos son aproximados y toman un carácter orientativo, no se han tenido en cuenta las paradas por pequeñas que sean. Toda la información relacionada con la ruta, textos, imágenes, vídeos, mapas, esquemas, tracks, poblaciones, y lugares de interés turístico están publicadas a título orientativo, pudiendo no coincidir con el estado actual de cada lugar. Antes de realizar cualquier actividad, valora tus conocimientos técnicos, tú forma física, infórmate sobre la meteorología y las variaciones que hubiera podido sufrir la ruta, equípate correctamente, sé prudente y responsable en todo momento, no sobrepasando tus capacidades. Igualmente, te animamos a documentarte con libros y guías especializadas para complementar la información descrita. SENDITUR no se responsabiliza de cualquier mal uso o uso inadecuado de las guías comprensivas de sus rutas y/o publicaciones así como del de sus guías electrónicas, ni de las variaciones por los motivos antes referidos que pudiera haber de sus descripciones y recomienda que cada uno sea responsable y prudente en la realización de la actividad.
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