Es una localidad integrada en el bonito Valle de Baztan al norte de Navarra, en el corazón de los pirineos atlánticos, y la constituyen tres barrios, Apote, Ordoqui e Iperburu, siendo la segunda población del municipio de Baztan por número de habitantes. En Irurita quedan numerosos vestigios prehistóricos y así lo cuentan sus monumentos megalíticos, como los dólmenes de Argibel. En la peña de los Generales se encuentran los túmulos de Argintzo y Luurzuo, y los que se hallan en Urlizte y Armatela. El nombre de Irurita aparece reseñado en el listado de las localidades navarras que conquistó Alfonso VIII de Castilla, cuando el rey Sancho VII el Fuerte se hallaba en alguna incursión en tierras ocupadas por los moros. Por aquel entonces, siglo XIII, ya se hablaba de un castillo realengo de Irurita, del que no queda ningún resto, también se sabe que el molino del lugar era de propiedad real. La historia de Irurita corre pareja a la del valle. El siglo XVIII trae consigo una profunda transformación social y económica en toda la comarca. Las torres-fortaleza dejan de ser elementos defensivos y se convierten en sedes palaciegas para los nobles, de lo que son causantes los dineros traídos por los indianos americanos y los puestos de relevante importancia de los baztaneses. Esta prospera economía local se prolonga en el tiempo hasta el primer tercio del siglo XX. Irurita hoy es una localidad actual que luce orgullosa su arraigada historia, cultura y costumbres.
Irurita, inmersa en un bucólico y precioso entorno natural, cuenta con una arquitectura civil en la que los palacios y casas blasonadas destacan sobre el resto del caserío. La plaza de Irurita, construida en 1898, llamada también del Rebote porque acoge en ella el campo de laxoa o de juego de pelota de guante, que es una de las más antiguas modalidades de la pelota, ofrece interesantes muestras de estilo gótico y barroco en sus construcciones, como la casa de los Gastón de Iriarte, ejemplo de palacio torreado del XVIII. La casa-palacio de los duques de Goyeneche cuya fachada principal luce además de los escudos de armas, dos víctores concedidos a dos hijos ilustres de esta casa. El palacio del Marqués de Casa Torre o Jauregizuria que es un ejemplo tradicional de palacio baztanes de cabo de armería cuya primitiva torre defensiva es de los siglos XIV y XV a la que luego en el siglo XVIII se le añadió el palacio barroco; es de propiedad privada perteneciendo a la misma familia desde 1437 y en su interior se guardan documentos que acreditan la antigua nobleza del linaje de sus propietarios.
En las afueras del pueblo llama la atención una construcción medieval gótica, es el palacio de Dorrea o Jauregizarra, el edificio más antiguo de Baztan que se conserva en pie y que en el año 1496 ya fue encuadrado entre las doce casas de linaje antiguo del Reino de Navarra. Aquí se encontró en el suelo el emblema familiar de los Baztán, enmarcado por las cruces de San Andrés, que fue entregado a los Baztan en reconocimiento por su participación en la Batalla de Baeza que tuvo lugar el día de San Andrés del año 1227. La iglesia parroquial del Salvador de Irurita fue construida en el siglo XVIII posiblemente sobre un templo anterior. Dentro del cementerio de la localidad se encuentra la ermita de Santa Bárbara y al lado del viejo molino harinero se puede admirar un puente medieval de un solo ojo que salva el río Bidasoa.
Irurita celebra sus fiestas patronales en honor a El Salvador en el mes de mayo más o menos por la Ascensión.
Los vítores con forma de águila negra que adornan las fachadas de las casas más señoriales de Irurita son emblemas con los que el Ayuntamiento distinguía a sus hijos ilustres que lograron prosperar en la corte madrileña y en el nuevo mundo.
En Irurita se encuentra el único ejemplo que se conserva en el valle de una ferrería donde desde antaño y hasta hace poco tiempo se herraba, en su porche cubierto, el ganado.
Se cuenta que hace muchos, muchos años se reunieron los vecinos de los pueblos colindantes para juntos festejar y regocijarse. De Ciga vinieron unos cuantos y se trajeron al juglar, poniéndose a bailar la danza del "lacayo" o "lezayo". A los de Irurita no les gustaba mucho e invitaron al juglar a que dejara de tocar, cosa a la que los de Ciga no accedieron y entonces se entabló entre ellos una disputa en la que unos salieron lastimados y los otros castigados por haber provocado la disputa.
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A Irurita se llega desde Pamplona por la N-121-A dirección Irún. A la altura de Oronoz Mugaire debemos seguir por la N-121-B dirección Francia por Dantxarinea. En esta carretera entre las localidades de Arraioz y Elizondo encontraremos los accesos a Irurita. Otra posibilidad es a través de la NA-2540 que desde Berroeta en la N-121-A llega hasta Irurita pasando antes por Zigaurre. También desde Irurita sale la NA-1740 que comunica la localidad con Eugi.
Irurita cuenta con parada de autobús que en diferentes horarios la comunican con Elizondo, Pamplona y otras localidades cercanas.
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