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Monasterio de Santa María de Carracedo
Carracedo del Monasterio, León
(1)
Monasterio benedictino y Palacio Real de la monarquía leonesa
Carracedo del Monasterio, León (1)
Monasterio benedictino y Palacio Real de la monarquía leonesa
Se sitúa a orillas del río Cúa en la localidad de Carracedo del Monasterio, en plena comarca de El Bierzo, entre Ponferrada y Villafranca del Bierzo y a pocos kilómetros de su vecina Cacabelos. El Monasterio de Santa María de Carracedo, en un principio benedictino y bajo el nombre de San Salvador de Carracedo, fue fundado por Bermudo II El Gotoso en el año 990 y a él llegaron y bajo él se acogieron numerosos monjes de otros conventos que huían de las huestes y acometidas de Almanzor, aunque este monasterio tampoco se salvó y quedó casi destruido. Se reconstruyó en el siglo XII bajo los auspicios de Doña Sancha, hermana de Alfonso VII de León. En esta época se levanta, debido a las grandes estancias de Doña Sancha en el monasterio y dentro de su recinto, el llamado Palacio de la Reina. Poco a poco fue prosperando y adquirió un gran poder económico, religioso y político, convirtiéndose en un gran cenobio que regía jurisdiccionalmente otros conventos benedictinos en tierras de León, Galicia, Asturias y Zamora.
En el siglo XIII se acogió bajo la Orden del Císter y cambió su advocación de San Salvador por la de Santa María la Real. El siglo XIV trajo para el monasterio una verdadera decadencia religiosa, moral y económica que se solventó en el año 1.505 con su adhesión a la Congregación Cisterciense de Castilla, volviendo a vivir un brillante resurgir y acometiéndose numerosas reformas, finalizando éstas en el siglo XVIII con la construcción de la iglesia actual donde se ubicaba la antigua cisterciense. La Guerra de la Independencia, con la invasión de los franceses y las diferentes desamortizaciones eclesiásticas fueron la causa de su total abandono, hasta que en 1.990 fue parcialmente restaurado, pero ya antes en el año 1.928 fue declarado Monumento Nacional.
Cuando el visitante se dirige a la entrada de este grandioso, por su tamaño y por lo que guarda dentro, monasterio, no sabe que va a descubrir en su recorrido unas dependencias que le van a transportar a otros tiempos y que con lo que le van a mostrar, le van a hacer poner en marcha su imaginación para así completar y poder recrear las escenas, otrora, aquí vividas. Un compendió de épocas y estilos arquitectónicos van desfilando ante sus ojos a cada paso, desde el románico de transición de la primitiva iglesia, al gótico del Mirador de la Reina, o al renacentista del claustro, refectorio y sacristía, finalizando en el barroco y neoclásico de la actual iglesia.
Bordeando el llamado Tercer Patio, construido entre los siglos XVII y XVIII, se entra en el Claustro Reglar desde el que una escalera, de estilo renacentista, invita a acceder a la experiencia más impactante de la visita, las tres dependencias del Palacio Real del siglo XIII. El Mirador de la Reina constituye una de las imágenes más conocidas del monasterio, por su artística galería de tres arcos, hasta ella se llega hoy en día por una escalera funcional desde el exterior. Desde el mirador se entra en la Cocina de la Reina, que es una gran sala cuadrangular donde cuatro esbeltas columnas con arcos soportan una bóveda central y donde sus ventanales y óculos dejan ver en una esquina de la estancia una impresionante chimenea, traspasando una puerta con un tímpano que representa a la Virgen muerta rodeada de los apóstoles, se entra en lo que fue el archivo, pero que en sus orígenes pudo ser el oratorio del abad. Desde el Claustro Reglar, renacentista, y en torno a él, se accede a la sacristía del siglo XVI, a la Sala Capitular, al locutorio y un pasaje lleva hacia la huerta. En las paredes de la Sala Capitular se ven hornacinas con sepulcros de abades.
El Refectorio, que es de finales del siglo XII, y la zona de almacén y cocina, hoy en día son la sala-museo, o centro de interpretación del Monasterio. No hay que olvidar, tampoco, que sus dependencias albergaron una hospedería, un hospital y la cárcel. Paseando por los restos del claustro de la hospedería se llega a la iglesia, del siglo XVIII y fachada neoclásica, construida sobre los restos del primitivo templo románico-protogótico. En una inscripción en la puerta de la iglesia, se puede leer cómo el 29 de agosto de 1.810 fueron elegidos, en el Monasterio de Carracedo, los primeros representantes democráticos de los leoneses para las Cortes de Cádiz. Además si lo que se quiere es disfrutar e imbuirse aún más en el entorno que brinda el monasterio se puede asistir cada primer fin de semana de agosto a un Festival Medieval, fiesta que ha sido declarada de interés turístico provincial, con mercadillo, desfile, teatrillos, cena medieval, noche del medievo…
La infanta Doña Sancha, hermana del emperador Alfonso VII de León, es recordada, tradicionalmente, por los vecinos del lugar como la reina Doña Sancha. A pesar de que no poseía este título, sí gobernó en El Bierzo desde el palacio de Villabuena con cargó de gobernadora y en nombre de su hermano, como una verdadera reina “berciana” El propio Alfonso mandó que la llamasen reina y que todos la tuviesen como a tal.
El Cisma de Occidente del año 1.378 al 1.417 también tuvo su influencia en Santa María de Carracedo pues se nombraron dos abades, cada uno seguidor de uno de los dos papas enfrentados.
El Monasterio de Santa María de Carracedo es un gran libro, un verdadero paraíso para los amantes de las Marcas de Cantería y Criptogramas, hay identificados un total de 844 signos, con 126 tipos diferentes, y están localizados en el exterior de la iglesia, torre medieval y dependencias monacales.
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Hasta Carracedo del Monasterio podemos llegar desde la A-6, más concretamente en el tramo comprendido entre Ponferrada y Villafranca del Bierzo encontraremos el acceso a esta localidad, que comunica directamente con la carretera LE-158/7 que nos llevará hasta la población. También siguiendo esta misma carretera pero en sentido contrario podremos llegar desde Cacabelos. Los servicios de autobús más cercanos a Carracedo del Monasterio son a través de la cercana localidad de Cacabelos que cubren la línea Ponferrada-Cacabelos de lunes a sábado en diferentes horarios.
El acceso al recinto del Monasterio de Santa María de Carracedo lo encontraremos en plena carretera LE-158/7, ya que ésta pasa junto al monasterio, sin necesidad de entrar en la localidad.
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Bonito y místico lugar, muy propicio para la ensoñación
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